Año 1992 Béjar.
Todos estudiaban en el colegio Dulce Nombre de Jesús.
Las monjitas de ese colegio y del de Méjico, no sólo nos querían mucho sino que también, siempre nos ayudaron en todo.
¡Miri estaba tan especial con ese vestido blanco! Se lo trajo Carmen de una sobrina suya y lo almidonó y puso bien planchado Isabel.
Después de la comunión en un bar que estaba junto a la parroquia, Pablo y Carmen, nos invitaron a tomar algo.
Luego nos fuimos Viki, Javi, la abuelita Isidra y el pequeño grupo que éramos, a comer algo en el autoservicio que había en Francisco Silvela.
Por supuesto, todos los niños vestidos de fiesta, corrieron a ver los peces del portal de Diego de León. Recuerdo perfectamente la cara de alegría de Miri y ese gesto de pillina que algunas veces ponía. ¡Que bonita!
Luego al retiro a jugar. El único problema que había es que desde muy pequeña no le gustaba que la hicieran fotos. Mira que carita pone: – ¡¿Más fotos, joooo!