Anyel en San Francisco, donde se fue con su padre y con Salvador.
Estas fotos están hechas allí. No tengo palabras…
Y en la siguiente foto, Salvador y Angélica, acaban de regresar de nuevo a España. Unos meses después. Gracias a Dios, o a la vida que siempre nos ha cuidado.
A Salvador, aún se le nota en la carita lo que supuso para él. Este pasaje de nuestras vidas, no lo voy a contar.
Así está bien. Estamos juntos, estamos felices, la vida ha seguido y todo está bien. Nada más.