Salvador ha tenido siempre una vena artista que no sabía él como encauzar jajajaaj en sus primeros años y durante su adolescencia, se dedicaba a deshacer juguetes, video consolas o cualquier artefacto que considerase él que podría transformar, para mejor, claro. Y generalmente ahí terminaba la vida útil del pobre cacharro.
Luego cuando entró en la escuela taller, descubrió el gusto que le daba cortar con la radial y volver a pegar con el soldador…ahí empezó a destaparse su verdadera arte:
Restaurar, modificar y crear belleza, de las inservibles y destartaladas bicicletas.
Comenzó y ya no pudo parar… Aquí pongo, aquí quito, aquí unas macetas…
Ahora le pego una hayada que me he encontrado, ahora un trozo de…
A eta la pinto de crema, a esta negra, a esta blanca…
Total, por muchas provincias de España, en muchos escaparates, en muchas fiestas y eventos; hay una bici hecha por Salvador, super preciosa!
Y es que él es como sus bicis: único y hecho a sí mismo. Capaz de llenar de belleza cualquier lugar.